A pesar de que finalmente no llegó en la segunda posición de la final cuando restaba muy poco para la bandera a cuadros lo de Ciprés fue brillante contando además con auto que cada vez esta más firme en cualquier condición de pista.
Esta fue una carrera donde reinó la lluvia, que complicó y mucho, los toques y sobre todo los despistes en donde el piloto de Olavarría selas arregló para ir avanzando desde el octavo lugar en el que partió la final para llegar en la última vuelta hasta la segunda posición detrás de Garavano después de salir mejor que Trebbiani cuando los largó el Pace Car, pero la mala fortuna le jugó en contra y en la salida de la primera S, el piano lo despidió y termió haciendo un trompo que lo relegó hasta la posición 13.
Al margen del resultado final, que de todos modos fue muy bueno, lo más positivo es que Ciprés demostró una gran condición para manejar y llevar un auto que sigue evolucionando en todo los aspectos y que en cualquier momento va a plasmar todo lo que viene insinuando con el trabajo y el aporte del equipo.
“Es una sensación muy rara porque sabíamos que podíamos pelear la punta y así lo hicimos, pero la condición de pista nos jugó una mala pasada y nos relegamos cuando estuvimos tan cerca del podio. Por eso digo que es todo muy raro porque la carrera fue muy buena durante todo el fin de semana al igual que el funcionamiento del auto que siempre fue mejorando. Por suerte tenemos revancha muy rápido en Paraná”, dijo el venadense Carlos Sava ni bien terminó la competencia.
Prensa Carlos Sava